15/1/10

La despedida.


Este será para mi el día mas triste de mi vidatener que separarme de ti será el motivo de mi nostalgia…pero hemos de decirnos adiós, por que lo nuestro no debe continuar...
Este será el día mas doloroso después de tu partidapor que... con ella te llevaras la mitad de mi corazón y de mi vida...Será el dia mas largo de mi existencia, puesto que en las horas restantes....
Mi mente se dedicará a recordarte sucesivamente y mi boca a pronunciar tu nombre...
Y lo harán en cada hora, en cada segundo de cada día...Serán mis primeros días oscuros, por que la luz de tu sonrisa se alejará de mis ojos brillarán con melancolía, ansiosos de ver tu rostro hermoso....
Que ya jamás se presentará ante ellos... mi voz gritará con inalcanzable cansancio tu nombre...
Pediré a fuertes voces tu presencia...tu mirada... se que lloraré por indefinidos momentos...
Y le diré a los roces de mi almohada lo mucho que te extraño y cuanto te amo...
Pero ni ella y mucho menos tu me podrán escuchar... ni responder...me quedaré ahogándome en mi llanto y tu no podrás estar ahí....para consolar mi pena...
Por que tenemos que decir adiós? Por que las cosas con un principio tienen un final?
Por que cuando uno ama no se le puede amar?
No lo se y tal vez no lo sabré jamás lo único que puedo asegurarte mi amor...
Es que hoy... precisamente hoy... será el día mas triste, largo y doloroso de mi vida... lo más hermoso es que siempre te amaré...

Chao.

Lukas con K ---- algo especial

31/5/09

Tres cosas para no olvidar.

Hace muchos años, cuando trabajaba como voluntario en un Hospital de Buenos Aires, conocí a una niñita llamada Isabel, quien sufría de una extraña enfermedad. Su única oportunidad de recuperación aparentemente era una transfusión de sangre de su hermanito de 5 años, quien había sobrevivido milagrosamente a la misma enfermedad y había desarrollado anticuerpos necesarios para combatirla.
El médico explicó la situación al hermano de la niña, y le preguntó si estaría dispuesto a dar su sangre a su hermana. Yo lo vi dudar por solo un momento antes de tomar un gran suspiro y decir: -Si, lo haré, si eso salva a Isabel-.
Mientras la transfusión continuaba, él estaba acostado en una cama al lado de la de su hermana, y sonreía mientras nosotros asistíamos a ambos, viendo retornar el color a las mejillas de la niña.
Pero al rato la cara del niño se puso pálida y su sonrisa desapareció. Miró al médico y le preguntó con voz temblorosa -¿A qué hora empezaré a morirme?-
Siendo solo un niño, no había comprendido al médico, pensaba que le daría toda su sangre a su hermana... ¡Y aún así se la daba!
Da todo por quien ames. Actitud, después de todo, es todo.
2: El helado
Hace unos días, un niño de alrededor de 10 años entró en una heladería y se sentó en una mesa. La camarera puso un vaso de agua en frente a él.
-¿Cuánto cuesta un cucurucho de helado de chocolate?-, preguntó el niño. –
Dos pesos cincuenta-, respondió la camarera. El niño sacó una mano de su bolsillo y examinó una cantidad de monedas...
-¿Cuanto cuesta un helado de chocolate en vasito?-, volvió a preguntar. Algunas personas estaban esperando ser atendidas y la camarera ya estaba un poco impaciente.
-¡Dos pesos!-, le contestó bruscamente.
El niño volvió a contar las monedas...
- Entonces quiero el helado en vasito-, dijo el niño. La camarera le trajo el helado, puso el ticket en la mesa y fue a atender otras mesas, refunfuñando por el tiempo que le había hecho perder el niño.
Éste terminó el helado, pagó en la caja y se fue. Poco después la camarera llegó a la mesa que el niño había ocupado, para limpiarla, y entonces le costó tragar saliva con lo que vio. Allí, puestos ordenadamente junto al plato vacío, había cincuenta centavos... su propina.
Jamás juzgues a alguien antes de tiempo.
3: La pregunta más importante
Durante mi segundo semestre en la Escuela de Enfermería, nuestro profesor nos tomó un examen sorpresa. Yo era una estudiante conciente y leí rápidamente todas las preguntas, hasta que llegué a la última:
¿Cuál es el nombre de la mujer que limpia la escuela?
Seguramente esto era algún tipo de broma. Yo había visto muchas veces a la mujer que limpiaba la escuela. Ella era alta, cabello oscuro, como de cincuenta años, pero... ¿Cómo iba yo a saber su nombre?
Entregué mi examen, dejando la ultima pregunta en blanco. Antes de que terminara la clase, alguien le preguntó al profesor si la última pregunta contaría para la nota del examen.
-Absolutamente-, dijo el profesor. En sus carreras ustedes conocerán muchas personas. Todas son importantes. Ellos merecen su atención y cuidado, aunque solo les sonrían y digan: -¡Hola!-
Yo nunca olvidé esa lección.
¡Ah!, y también aprendí que su nombre era Dorotea...
Respeta a cada ser humano que conozcas, todos somos únicos e importantes.